Dejadme tras ellas,
sus escoltas de
amorosos arcoíris.
De mi musa morena,
otras alas para mapas entrañables.
En el viento,
otra sugerencia de arados remotos…
Otro plazo para el alma, ´
en el corazón de mujeres
que se desenredan…
Un germinar en los
panes ,
con tan rosas raíces de un beso…
tan especiales intercambios
de las cartulinas en los patios…
Las panteras de
chocolate ,
sus orillas
que solo pretenden
las espumas…
tan de la mano ,
donde juegan
nuestros reflejos con el océano.