sábado, 13 de junio de 2015

Una vida fabricada de comienzos.

Amainas libre, perla pirata en el licor tras los ojos,
velero menguante…
 ha caído el astro dorado en el cuenco místico,
 entre la moneda y el verso…

Se celebra en nuevas despedidas
 y los sentimientos son como de lluvia;
los suspiros como rosas…
 nuevos comienzos en columpios que sonríen al recuerdo…
 donde se amotina la fauna borrada.


Tanto abunda lo espumoso en lo increado y
, siempre, todos los jardines regresan al hombre cero.
Celebrar de ademanes descosidos del ahorro,
de los moderados estandartes  de remedios del pobre.


El atardecer transparente.

La ingenuidad subía espumosa por la percepción dorada.
La abundancia me hizo estrella y
, ahora ,
 tras la conversación de los astros llovidos…
siempre retorno espectral por el retraso de los días grises.

Cuadriláteros de la razón bajo la cabellera marchita…
donde aúllan emociones,
donde poder continuar imaginario;
la ciudad me mira donde vacío el puerto,
las gaviotas que me rondan
tras maquillar el derrotero 
con los sosiegos de todo lo negro en un café…

 Los vientos pasan deprisa en los ojos del alma…
la formalidad volverá de sus ambiciones heridas
 donde habita el sosiego tras alguna melodía absoluta.
Isla pop en el chupete de todas las cosas.

La revancha en el colorismo de los dedos,
raíces de algún entusiasmo.
 Los vicios disfrazados de caprichos ,

donde no todos los consuelos son psicodélicos.

jueves, 11 de junio de 2015

La estación intermitente.


Continuidad es diluir en mi paleta delirante
cada gramo de ciudad sentimental.

Sembrar en versos de pretexto los cigarrillos de espera.
Abrigar el corazón en una cajita de colecciones amarillas.
La memoria de un beso con sabor a lápiz.

El segundero con sus distancias donde se muere y se nace.
Parpadeo de ilusiones sobre días grises en la estación del retraso.

La receptividad en un jardín de gigantes de piedra,
las tertulias de rosas en rocío de recreo...
Cuencos místicos entre nubes de patios,
convivir en el ojo azul de abismo libre...

Un camino ajedrezado entre los estandartes del sueño.
Vientos de cipreses entre engranajes de danza.
Las canciones de Diego Vasallo
columpian una luna violeta sobre horizontes de letras..

lunes, 1 de junio de 2015

Sensaciones son motivos.


 Han ramificado las sensaciones del parque,
en el mosaico de la fuente,
en las huellas de la canción.

El tiempo, rosa roja que ha florecido
entre las espinas de la zozobra del artificio.

Conferencias de la espesura
con el caudal desbordado de las multitudes.

Pues ha llovido mucho,
desde las incontables ventanas grises...
hasta los cafetales en los tejados de la ciudad surrealista.