El amor nos trae de la panza como gato al agua….
Como rebuzno en flor para
un naufragio de fresa.
Y quisieran su aliento de nube mis lobos de abismo…
Y la quisieran en licor de montañas para una corona de
otoño.
Y quisiera para ella encontrar el verso más cristalino
y otro eslabón de luz en una lágrima de mi equilibrio.
Y quisiera traerla a su lecho de espumas
la última estrella de
los titulares del cielo.
Y quisieran su nariz,
un botoncillo del entusiasmo,
estrategas con nuestros
comodines del sueño.
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