lunes, 28 de diciembre de 2015

Estandartes.

Como los rastros de su estrategia en el mundo benévolo, sin mas remedio.
Donde cultivar todo lo que no me dejo ella.


Yo también me voy con la mirada de novias a la fuga...
aventurero en los ojos del desarraigo femenino...
con el ocio de una nueva apuesta en la clínica del ánimo.

Pensé que, para recuperar tu nariz de los árboles,
nunca es tarde, siempre es el lugar...
es el rotulador de marihuana con un licor de habitación doble;
un jardín en la coraza fantástica.

no es fácil, tras haber sido rescatado de un fragmento;
de otro adiós sin comprender.
Tras haberse equivocado durmiendo, proyectar colgado...
diminutivo de piloto fuerte en el ojo terrenal abierto.

Saludo a las canciones paseantes,
estandarte del abandono de la insensatez.
El ciprés que escribió a nuestros pescadores perdidos,
a nuestras pasiones semejantes.

Imaginar como soportar el frío del atardecer...
los bolígrafos de colores de las familias en sus alturas lejanas,
los nombres graciosos en el camino de las estrellas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario